San Juan, lunes 16 de noviembre del 2020
Por Guadalupe Lloveras
Otro hecho de violencia de género, sucedió el pasado domingo cuando un hombre comenzó a atacar a su pareja en pleno Chimbas.
Sin dudas, la violencia de género no ha tenido descanso para las mujeres durante este particular año, por la pandemia mundial por la enfermedad del Covid-19. La provincia de San Juan no queda exenta de dicha situación. El pasado domingo un hombre golpeó a puñetazos a su novia y luego la amenazó con matarla.
El hombre de aproximadamente 25 años de edad, comenzó a violentar a su pareja, propiciándole golpes, empujones, y puñetazos en el brazo. Luego de esto, el agresor se acercó a una mesa cercana a donde ocurría el episodio de violencia para amenazar a la victima con matarla y luego quitarse la vida.
Posteriormente, la mujer que estaba siendo violentada, logró comunicarse con el 911 y pedir ayuda. La Policía fue al lugar y detuvo al sujeto. El hombre quedó a disposición de Flagrancia por delitos de amenazas y lesiones leves agravadas por ser cometidas en contexto de violencia de género.
Sin dudas este es uno mas de los miles de casos por violencia de género que ocurren a diario. Desde el Observatorio de Violencia contra las Mujeres «Ahora que si nos ven» desde el 1 de enero hasta el 31 de octubre del corriente año, en Argentina se perpetraron 255 femicidios. Esto nos demuestra que la violencia contra las mujeres, no ha disminuido en situación de encierro por la pandemia del Coronavirus. Por consiguiente, el aislamiento generó las condiciones para que más abusos se cometieran. El hogar, continua siendo para las mujeres victimas de violencia de género el lugar más inseguro, en donde el 64,7% de los femicidios ocurrió en la vivienda de la víctima. Otro dato importante que podemos contextualizar con el hecho ocurrido en el departamento de Chimbas, es que el 64,4% de los femicidios fue consumado por la pareja o ex pareja de la victima, lo mismo ocurre con las diferentes manifestaciones de violencia (física, económica, psicológica, etc.) a la que se ven sometidas las mujeres. Esto ocurre porque en la mayoría de los casos, el femicida o el agresor ven a sus parejas como alguien que les pertenece, que es de su propiedad.
Desde el comienzo del aislamiento social, preventivo y obligatorio se relevaron 174 femicidios, un dato que deja en evidencia la exposición a la que se encuentran las mujeres que sufren violencia al estar aisladas con su agresor. Vemos con preocupación que de las 255 víctimas de femicidio 44 habían realizado al menos una denuncia y 16 tenían medidas judiciales, pero eso no evitó que fueran asesinadas (Observatorio de Violencia contra las Mujeres «Ahora que si nos ven»).



Estas cifras alarman y sin dudas ponen de manifiesto que es necesario un Estado y una sociedad que garantice las condiciones dignas para que las niñas y adolescentes que se ven inmersas en la violencia machista, en gran parte por quienes tienen en su circulo más cercano, como familiares y vecinos, puedan vivir libres y sin miedo. Además es necesario la implementación de la Ley de Educación Sexual Integral y sus contenidos en todos los niveles educativos, en todas las provincias de la República Argentina, con el objetivo de construir relaciones más igualitarias y de deconstruir estereotipos y mandatos patriarcales. Solo de esta manera podremos pensar un futuro sin violencia machista, y en un mundo mas justo y libre para todas las mujeres que habitan este país.
