
Por Emilce Moragues. Periodista especialista en políticas públicas en discapacidad e inclusión
Una de las salidas más eficaces de una situación de tensión, es una broma que rompa el hielo, porque incluso si algo nos desagrada, después de reírnos un poco de eso, podemos mirarlo con otros ojos, ya no tan dramáticos quizás.
En lenguaje propio de redes sociales, los memes y stickers son esa bocanada de gracia a lo incómodo, lo polémico, lo difícil.
Esas características implican que aquello de lo que nos reímos con estos recursos, aunque pueda disfrazarse de que sí, no es un entramado tan simple.
Y ahí, la cosa va perdiendo (o ganando) gracia…
Las diversidades de etnia y raza, las desigualdades socio económicas, las formas de vincularse, percepción de identidad, corporalidades, etc.
Entra tensión, sale chiste, más/ menos delicadeza del asunto.
En lo que respecta a #Discapacidad, reírse de la situación está, pareciera, menos permitido.
¿Por qué? Claramente la connotación negativa de esa situación es la respuesta.
Algo como: sufren demasiado, no nos riamos de eso.
Personalmente, siempre digo, si yo me río, con humor negro sobre mí convivir con discapacidad, vos reíte. Porque siento que en el humor suspicaz también hay mucho de enseñanza aprendizaje.
Pero ¿Y si yo, todxs, vos, no nos reímos?
¿Qué, a quién, con qué temas y hasta qué punto está/ estamos habilitadxs a hacer gracia sobre la diversidad de y en otro ser?.
Empezando por saber que quien es protagonista de la humorada quiere serlo.
Y siguiendo por pensar, dónde se encuentra esa persona, respecto de la situación de tensión a la que que queremos evadir con el chiste.
Reíte con quien usa silla de ruedas cuando hace alusión a caminar, NO tapes rampas o puentes.
Reíte con el ciegx si te dice no te vi venir, NO obstaculices su camino, ni le invites donde el braile sea un chiste por lo ausente.
Reíte, o enojate si querés, pero en NINGÚN CASO digas: Mogólico, tontito, down, como insulto.
Reíte si la persona con discapacidad no visible sonríe, NO le anules porque “no se le nota”.
Reíte con la persona, no seas partícipe de la vida burla a su situación de desigualdad.
Reíte, no te burles.
Si es un chiste, que sea un chiste del que nos riamos todxs.